Purga militar en Colombia desató ola de denuncias sobre crímenes de Ejército

La destitución de 27 militares colombianos, incluidos tres generales, por su presunta responsabilidad en la muerte de unos 11 jóvenes presentados falsamente como irregulares abatidos en combates, desató el jueves una ola de denuncias sobre casos similares en varias regiones.

Los hechos señalan al menos un centenar y medio de asesinatos de civiles, que habrían sido reportados por el Ejército como guerrilleros o paramilitares muertos en enfrentamientos para reclamar éxitos militares, según parientes de los fallecidos y organizaciones no gubernamentales (ONG) de derechos humanos.
Uno de los casos fue denunciado en el departamento de Córdoba (norte), donde familiares de 24 jóvenes desaparecidos y presentados luego como muertos en combates entre 2007 y 2008, aseguraron que sus parientes fueron víctimas de los llamados "falsos positivos".

"Mi hijo desapareció el 12 de junio de 2007 y al día siguiente apareció asesinado", dijo Rosmira Olaya al noticiario de la cadena Caracol.

El coronel Jorge Salgado, jefe del Ejército en la región, señaló a periodistas que por este episodio están en marcha "investigaciones disciplinarias y penales".
Mientras, en el departamento de Huila (sur) la ONG Observatorio Surcolombiano de Derechos Humanos denunció que en el último año y medio desaparecieron 27 personas, cuyos cadáveres fueron encontrados en pueblos distantes de sus residencias.
"Estamos casi convencidos de que un alto número de ellos corresponde a falsos positivos. Fueron señalados como extorsionistas dados de baja en enfrentamientos", dijo Alfonso Morelos, portavoz de la entidad.

También en Huila, Jesús Gutiérrez, director de una fundación que ayuda a indigentes en Neiva (la capital regional), denunció que uno de ellos fue presentado como abatido por las tropas lejos de allí.

A su vez, en el departamento de Sincelejo, una asociación de víctimas realizó un acto simbólico para recordar a un centenar de jóvenes muertos en circunstancias parecidas en el último año.

"Mi hijo desapareció el 5 de julio de 2007 y al día siguiente apreció muerto en San Benito Abad. Le pusieron un arma en la mano derecha, cuando en realidad era zurdo", señalo Marta Romero a Caracol.

Otros hechos fueron denunciados en el departamento de Santander (norte), donde murieron los 11 jóvenes desaparecidos en un barrio humilde de Bogotá, y en Cesar, donde se reportaron 17 casos desde 2005