Denuncian nueva incursión colombiana en Ecuador

Publicado en Prensa Latina, 21 de octubre

La Asociación Latinoamericana para los Derechos Humanos (ALDHU) denunció una nueva incursión del Ejército colombiano por la zona noreste de Ecuador, lo cual calificó de reiterada violación de las normas internacionales.

Juan de Dios Parra, secretario de la ALDHU, afirmó que dos escuadras militares, integradas por unos 30 efectivos del vecino país cruzaron el río San Miguel y se internaron en territorio ecuatoriano, en el caserío 18 de septiembre de la provincia de Sucumbíos.

Los guardias allanaron unas 40 fincas de campesinos, golpearon y secuestraron a varios agricultores del sector, subrayó Parra, al citar testimonios de habitantes de esa zona fronteriza.

Las mujeres, hombres y niños fueron amarrados, y algunos fueron sometidos a golpizas y torturas; hechos estos que “se siguen cometiendo en estos momentos", resaltó.

La "ALDHU denuncia esta invasión y hacemos notar que se produce coincidencialmente un día después que el Ejército nacional abandonó el lugar que mantenía bajo su resguardo, y a pocas horas del viaje anunciado por el presidente Rafael Correa a esta región del país", alertó.

Se trata de una deliberada acción por parte del gobierno de Bogotá, con el propósito de agudizar las críticas situaciones que mantiene con Ecuador, aseveró.

Parra advirtió que esta nueva incursión se registra después de las últimas declaraciones de presidente de la vecina nación, Álvaro Uribe, quien lanzó una serie de acusaciones falsas contra el gobierno y las Fuerzas Armadas de Ecuador.

En este sentido, llamó a la comunidad internacional a repudiar la violación del territorio nacional, que atenta contra la paz y la seguridad regional.

El Ministerio de Defensa anunció por su parte que el comando conjunto de las Fuerzas Armadas investiga esta denuncia, mientras existe un reforzamiento de la vigilancia en poblados, carreteras y rutas fluviales de la frontera con el vecino país.

Ecuador rompió relaciones diplomáticas con Colombia el 3 de marzo último, dos días después del ataque militar de esa nación a una zona norte de este país, que dejó un saldo de 25 muertos, incluidos cuatro mexicanos y el líder guerrillero Raúl Reyes.